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Mostrando entradas de enero, 2013

¿Por qué hay algo y no más bien nada?

Decía Leonard Peikoff que : "El concepto de 'causa' es inaplicable al Universo; Por definición, no hay nada fuera de la totalidad que actúe como su causa. El Universo simplemente es ; es un primario irreducible" Yo tengo para mi (constructivismo radical) que el concepto de "causa" y todos los otros conceptos originados a causa de su uso, no son más que herramientas (cognitivas) cuya razón (evolutiva) de ser es, redoble de tambores, su mera utilidad adaptativa...a nivel macro, donde nos jugamos la supervivencia. En ese sentido, apostar que lo de "causas" y demás palabrería sea útil a nivel ontológico, es tan probable como que a un pez fuera del agua le basten las branquias para no quedar asfixiado.

De la utilidad (marginal) de la filosofía

Mucho se ha estado estos días discutiendo sobre el obligatorio temario de la deficiente educación preuniversitaria habida por estos lares. Como cada vez que se proponen reformas la supervivencia de la filosofía termina por pender de un hilo, no han faltado en consecuencia profesores filósofos maestros que han hecho apologías de la materia que imparten bastante, cuando menos, sonrojantes, en tanto que han ponderado su valor en torno a infinito y más allá, vamos, que sin filosofía no existiría la democracia, la ciencia, la ética, ni los reyes magos. Bien. Vaya por delante que gusto de la filosofía, a la prueba está visto este blog, pero todas estas proclamas, me temo, pecan de un mismo fallo, éste es, un análisis abstracto del valor de su objeto de estudio del tipo qué vale más, la filosofía o la economía, y no más bien, más modestamente, más en concreto, con un contexto, la evaluación de su utilidad marginal, quiero decir, y además es problema famoso de la filosofía primero, de la econ...

La consciencia (des)centralizada

De todas maneras, el principio básico de la división que utilizó Descartes ya no parece tan admisible como lo era en su época. Ya no es útil ni exacto definir la materia común como aquello que tiene extensión en el espacio. Los electrones, por ejemplo, son trocitos de materia, pero las mejores teorías actuales los describen como partículas puntuales sin ningún tipo de extensión (inclusive carecen de una determinada posición espacial). Y, de acuerdo con la teoría de gravitación de Einstein, un astro completo se puede encontrar en esta misma situación si se ve sometido a un colapso gravitacional total. Si verdaderamente existe una división entre la mente y el cuerpo, parece que Descartes no pudo localizar la línea divisoria [Materia y conciencia, Paul M. Churchland] "La exigencia de unos átomos de sentimiento -escribió James- me parece una elucubración, una metáfora ilegítima. Racionalmente, vemos qué tipo de perplejidades acarrea, y, empíricamente, ningún hecho ...